¿Cuáles son los complementos eficaces para estimular la libido de las mujeres?

Respuesta:
Sí, hay varios complementos destinados a aumentar la libido femenina.

Para las mujeres mayores de 50 años, la dehidroepiandrosterona (DHEA) es uno de los más prometedores. Es una hormona esteroidea anabolizante que producen las glándulas suprarrenales naturalmente a partir del colesterol. Su producción alcanza un pico justo antes de la pubertad, y después disminuye progresivamente (a los 60 años, el cuerpo produce menos del 20 % de DHEA que producía a los 20 años).
Un estudio de 12 meses, aleatorizado doble ciego y controlado por placebo (1), ha evidenciado los efectos beneficiosos de una dosis diaria de 50 mg de DHEA en las mujeres mayores de 60 años. Las participantes constataron una mejora de la libido y una mayor satisfacción sexual. Otros tres estudios aleatorizados han mostrado que ésta estimulaba sobre todo la libido de las mujeres premenopáusicas y postmenopáusicas, así como de las mujeres con fatiga suprarrenal (2-4).

No es de sorprender, ya que la DHEA puede servir al organismo de material de partida para la producción de otras hormonas, como el estrógeno o la hormona reproductora masculina.

La maca es otra opción, totalmente natural, para relanzar su sexualidad, pero parece que el efecto es más marcado en los hombres . Es una planta rara que crece en el altiplano andino y que es conocida por aumentar el deseo sexual según la medicina tradicional peruana.
Unos investigadores han evidenciado esta propiedad estimulante en hombres perfectamente sanos en el curso de un estudio (5) que duró 12 semanas (con unas dosis de maca de 1,5 g y 3 g al día). Por otra parte, otro estudio (6) ha evidenciado un aumento de la cantidad de esperma y de la motilidad de los espermatozoides. Todavía no se conocen los mecanismos de acción precisos de esta planta denominada “el oro de los Incas”, a pesar de que varios investigadores han presentado la hipótesis de que ésta posiblemente actúa como tónico general (7). Otros estudios han mostrado que ésta también puede actuar atenuando los síntomas de tipo psicológico (como la ansiedad o la depresión) que sin duda juegan un papel en la disfunción sexual (8).
A condición de tomarla en forma de complemento estandarizado en macamidas y en macaenos (los principios supuestamente activos).

El kava es también una alternativa convincente, pero va sobre todo dirigido a las mujeres que padecen disfunciones sexuales relacionadas con trastornos de ansiedad (9-10) (incluidos los relacionados con la menopausia). Lo utilizan desde hace milenios los habitantes de las islas del Pacífico para mejorar el estado de ánimo y predisponer a la socialización.

Hay otras posibilidades, con la L-arginina, los extractos de ginseng (Panax ginseng) y los extractos de Ginkgo biloba. Un famoso estudio (11) ha demostrado la potencia de una fórmula que combina los 3 compuestos (entre los que hay 2,5 g de L-arginina): ¡al cabo de solo 4 semanas de tratamiento, el 70 % de las participantes informaron de un aumento significativo del deseo sexual, el 53 % de ellas una mejora de la sensibilidad del clítoris y el 47 % incluso constataron un aumento de la frecuencia de sus orgasmos! Estos efectos se atribuyen sobre todo a la arginina, un aminoácido a partir del cual el organismo fabrica óxido nítrico, una sustancia que favorece la dilatación de los vasos sanguíneos. En mujeres menopáusicas sometidas a una estimulación visual, la ingesta de complementos de arginina había permitido anteriormente registrar una respuesta fisiológica objetiva: el aumento de la amplitud de las pulsaciones vaginales (12).

Finalmente, una última posibilidad: l’Ashwagandha (Whitania somnífera). Esta planta, un potente adaptógeno, integrada desde hace más de 3.000 años a la medicina ayurvédica, había permitido aumentar la excitación y la lubricación en una selección de mujeres sin deseo sexual (tenían de 21 a 50 años) en un estudio publicado en 2015 (13).

Así pues, las posibilidades son relativamente numerosas...